Vino y Cava: testimonios solariegos

Vino y Cava: testimonios solariegos

Aunque el cava tiene un origen relativamente reciente, la historia del vino es milenaria. Como vimos en algún artículo de nuestro blog anterior (ver bibliografía) es en la ribera mediterránea donde éste empieza a florecer, gracias a un maravilloso clima que favorece el cultivo de todo tipo de frutos, entre ellos evidentemente la uva. Mientras tanto, otros pueblos más septentrionales, con temperaturas más rigurosas, tuvieron que centrarse en los cereales, desarrollando otras bebidas tales como la cerveza.

La Fiesta de la Cosecha

En vísperas de una cosecha que cada vez se avanza más, son innumerables las celebraciones que tienen lugar en nuestra geografía. Se trata en la mayor parte de ocasiones de antiguas tradiciones que fundamentalmente festejaban el final de la recolección, una época dura de trabajo, pero reconfortante en cuanto a la prosperidad que aportan. Hoy en día, estas conmemoraciones se han puesto al día con los tiempos modernos, ofreciendo visitas guiadas a las bodegas, realización de catas, atractivos elementos audiovisuales…, pero conservando ciertos elementos enraizados en el pasado.

Una Tradición Clásica

Desentrañando los orígenes, todos hemos oído hablar de Dioniso, uno de los doce Grandes Dioses de la mitología griega, el más joven por cierto. Según ella, fue él quien inventó el vino en el monte Nisa. Él mismo también, en uno de sus numerosos viajes, trajo la viña de Egipto y, como curiosidad, diremos que se esposó con Ariadna (la prometida de Teseo, que había sido abandonada por éste después de acabar con el Minotauro) El mito del Dios del vino sirvió como una excelente excusa para que los antiguos griegos se inhibieran de las restricciones sociales y se consintieran actos que habitualmente se consideraban tabú. Por si esto no fuera poco, durante el festival a Dioniso, las mujeres, los esclavos e incluso los prisioneros podían experimentar la libertad, que estaba reservada exclusivamente a los ciudadanos (hombres)  Todo ello justificaba de sobras la devoción por ese Dios: no sólo les proveía de un preciado caldo, sino que también les permitía evadirse de una dura realidad. Quizás si hubieran dispuesto de un vino espumoso la fiesta hubiera sido completa… La cuestión es que estas celebraciones fueron adoptadas por los romanos, con su Dios equivalente: Baco, los cuales las difundieron por todo el Mediterráneo.

El Burro en el País del Cava

Dando un salto en el tiempo, los festejos han perdurado hasta nuestros tiempos, se podría decir que con un carácter más civilizado, aunque no estaría del todo seguro… El Penedés, el país del Cava, no es una excepción y prácticamente todos los pueblos, por pequeños que sean, llevan a cabo una celebración más o menos cercana al periodo de la cosecha. Por poner un ejemplo, hablaremos de la fiesta del Mosto de La Granada (un pueblo de unos 2.000 habitantes, con el mercado más antiguo de nuestra comarca- de la época romana- situado a un kilómetro escaso de la capital- Vilafranca del Penedés) La actividad central de la fiesta es, ni más ni menos, la subida del burro al campanario. La leyenda cuenta que en el pueblo había un burro que no comía y estaba quedando sumamente enjuto. Cuando paseaba por el pueblo, sus propietarios se percataron que se paraba delante de la iglesia y se quedaba fijamente mirando un pequeño lecho de hierba encima del campanario. Con el objeto de conseguir que el burro comiera, los vecinos construyeron andamios, poleas y todo tipo de artefactos para elevarlo y que pudiera alimentarse en el sagrado emplazamiento. Llegado el día, cuando el animal estaba cerca de coronar el campanario, todo el montaje se fue a pique. Si el burro sobrevivió no tenemos idea, pero sí quedó un hoyo en el suelo, que aún hoy se conserva. Actualmente, el burro es una figura de unos tres metros portada por dos personas, que ofrece un bonito espectáculo de fuego, a la vez que moja a los visitantes a través de un largo atributo masculino. Por cierto, este burro sí llega al campanario… La leyenda del burro es compartida por varias poblaciones catalanas, aunque sólo Solsona (en Carnaval) y La Granada ofrecen una recreación.

Para ponernos cara…

Si en algún momento tienen intención de visitar el corazón del cava para alguna fiesta popular o, simplemente, para conocer nuestros parajes, estaremos más que encantados de poderles conocer en nuestro establecimiento de Cavas Alsinac en Vilafranca.

Fuentes de Información

Para realizar este artículo hemos empleado información de los siguientes enlaces y bibliografía:
– “Los Mitos Griegos.”, Robert Graves (Ariel, 1981)
– “Festa del Most: El vi fa pujar el ruc al campanar.”
– “Diez fiestas imprescindibles de la vendimia en España.”
– “Dionisios y la custodia de la vendimia.”
– “The Ancient Festivals Of Dionysus In Athens: ‘Euhoi Bacchoi’.”
– “10 Party Facts about the Roman God of Wine.”

Los siguientes post de nuestro blog tratan una temática afín a este artículo:
– Cava y la Navidad: el legado de los fenicios.
– La geografía del corazón del Cava
– Los votos matrimoniales con Cava de César y Cleopatra.